Embarazo y suplementos minerales y vitamínicos

10 abr

El embarazo es una situación fisiológica. Es decir, el embarazo es un “estado de buena esperanza” en la que los médicos no tienen nada que hacer y la mujer se cuida haciendo vida sana y evitando el tabaco y el alcohol. Si acaso, la matrona puede asesorar a la embarazada sin experiencia, o ayudar a tomar decisiones en el tercer trimestre. De hecho, mucho de lo que se hace en la mujer embarazada es encarnizamiento, por innecesario (véase artículo relacionado Encarnizamiento diagnóstico y terapéutico con las mujeres). En la actualidad se incluyen en varios protocolos públicos y privados recomendaciones sin fundamento científico sobre suplementos de vitaminas y minerales. Por ejemplo, el suplemento con ácido fólico (que tendria utilidad durante las tres primeras semanas, como mucho), o el suplemento con iodo (que conlleva deterioro del tiroides de la embarazada, y dificultades del desarrollo psicomotor del recién nacido), o el suplemento con hierro (innecesario, salvo anemia). De todo ello, y más, se habla en la entrevista radiofónica, y se resume en las respuestas en inglés.